Consejos para que tu oficina en casa sea súper productiva
Serás mucho más productivo si adoptas un enfoque algo más convencional y deliberado a la hora de planificar tu oficina en casa. Aquí tienes cinco consejos que te ayudarán a empezar con buen pie tu nueva oficina en casa:
- Hazlo privado
- Consigue una buena iluminación
- Estar cómodo
- Proporcionar un almacenamiento adecuado
- Empezar con un plan
Consejo nº 1: Hazlo privado
Para entrar en «modo trabajo» necesitas algún tipo de límite entre tu espacio vital y tu oficina en casa. Encuentra una forma de dar a tu oficina en casa cierto grado de privacidad. Una habitación libre es la opción perfecta. (Si no puedes permitirte el lujo de tener una habitación libre, busca la forma de crear un rincón en el salón y utiliza algo como una estantería para establecer el límite que necesitas. No te sentirás encerrado, pero mentalmente seguirás teniendo tu espacio de oficina independiente.
Consejo nº 2: Darse una buena iluminación
¿Qué parte de la jornada laboral se dedica a leer, teclear o escribir? No tengo la estadística exacta, pero es probable que sea casi el 100% para muchos trabajadores. Sin una buena iluminación, pronto sufrirás fatiga ocular e incluso dolores de cabeza. La luz natural indirecta es estupenda, pero si es demasiado intensa o está situada en un ángulo que provoca el deslumbramiento de la pantalla del ordenador, puede ser un problema. Utiliza la luz de las ventanas con prudencia. Si no tienes una fuente de luz natural, unos focos con lente estratégicamente colocados pueden proporcionarte una iluminación uniforme e indirecta.
Consejo nº 3: Ponte cómodo
Al estar leyendo y escribiendo todo el día, estarás sentado en tu escritorio. Invierte en una buena silla de oficina ergonómica. No vayas a la tienda de material de oficina, apuntes a una que esté en oferta y digas: «Me la llevo». Pruébalas. Una silla de oficina ergonómica bien diseñada te permitirá ajustar los brazos, la altura y tanto la inclinación como el nivel vertical del respaldo. Aunque sea una silla, deberías poder ajustarla para que se adapte como un guante.
Consejo nº 4: Proporcione un almacenamiento adecuado
En poco tiempo, te darás cuenta de que has adquirido un inventario bastante grande de material de oficina diverso. Necesitas poner todas esas cosas en algún sitio. Lo ideal es un par de estantes en un armario de almacenamiento. Si no hay un armario disponible, compra una bañera de almacenamiento. Tu oficina en casa también necesita estanterías o una librería para guardar los artículos que sólo necesitas ocasionalmente y un archivador de calidad. Por último, invierte en unos buenos organizadores de escritorio para mantener desordenado tu espacio de trabajo más importante.
Consejo nº 5: Empiece con un plan
Ahora que ya tienes una idea del tipo de espacio que necesitas y de lo que va a caber en ese espacio, es el momento de pensar en la distribución de tu oficina en casa. Planifícalo sobre el papel. Quizá quieras optar por la clásica configuración de escritorio en forma de L. Los objetos que se utilizan con menos frecuencia pueden colocarse a un lado, mientras que el material que se utiliza siempre está al alcance de la mano. Es mucho más fácil trabajar con un trozo de papel cuadriculado y recortes que se ajusten al tamaño de los muebles de tu oficina que estar empujando el escritorio, el archivador y las estanterías por toda la casa. Al fin y al cabo, no querrás empezar tu nuevo negocio en casa con una reclamación de indemnización por accidente laboral contra ti mismo.